OLGA, MI MUJER
Amar la vida
atarme al atardecer en la cintura los revólveres
y a medianoche
hartarme de las cotidianas y extrañas ceremonias.
Tener que conseguir agua para beber
y espantar con mis gritos
animales salvajes lejos del hogar. Precisamente a
[medianoche
cuando aúllan los lobos y los perros y los hombres
desean de
su prójimo la mujer.
Luna de medianoche, tu cara
amada por los animales salvajes
que danzan y
se mueren a mi alrededor
cegados por el azul violento de tu sexo.
Amada
Luna de medianoche bebiendo del arroyo
la sangre de los hermanos muertos
en batalla
y el semen de blancos ruiseñores.
Amante del misterio
tu voz
inicia los últimos rituales en tu cuerpo
condenado a realizar trabajos
forzados.
Tocarte la cara con mis manos
obrera del amor.
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